Sofocado por el calor abrasador, un gran ejemplar de elefante (Loxodonta africana) llega a la poza de Okaukuejo para saciar su sed y gratificarse con un refrescante baño de barro que no sólo le aliviará del calor, sino que le proporcionará también una excelente capa de protección contra molestos parásitos.
miércoles, 5 de enero de 2005
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario